Existen ciertos elementos, centrales en el diseño de interiores, que influyen directamente en la percepción de un espacio. El color, las dimensiones del mobiliario y los materiales que lo componen (textura y formato) son algunos de ellos.
Alternativas para ampliar o reducir la percepción de un espacio
Además del impacto cognitivo y emocional que tienen los colores en las personas (objeto de estudio de la neuroarquitectura), el color también afecta las propiedades visuales de los objetos y sus dimensiones.
En materia de diseño de interiores, se puede modificar la percepción de un espacio eligiendo los tonos adecuados. Los colores rebotan luz, por lo que tonalidades más claras y frías harán que el espacio parezca más grande. Los colores más oscuros, en cambio, brindarán la sensación de un espacio más cerrado y pequeño a la vista.

Dentro de una habitación se puede manipular la sensación espacial de diversas maneras:
Para aumentar el ancho, por ejemplo, se recomienda pintar la pared posterior y el techo con un color oscuro (el mismo en ambos lados). También se aconseja dejar las paredes laterales más claras. Esta técnica es muy utilizada en pasillos y habitaciones estrechas. Los colores fríos, como el azul o el verde, funcionan muy bien a la hora de “alejar” las paredes.
Para quienes buscan el efecto contrario se recomienda pintar las dos paredes laterales opuestas en colores oscuros (el mismo en ambos lados) y dejar el fondo y el techo en un tono claros. De esta manera, se estrechará el espacio y se generará un ambiente más cálido.
Para ampliar visualmente un espacio también se puede jugar con el color de las ventanas, en contraste con el de las paredes. “Pintar las carpinterías de las ventanas de color blanco y la pared de esas ventanas algo más oscura, hará que tu salón se perciba más vivo, estimulante, con más luz, y también más grande”, indica Isabel Lavín, periodista especializada en decoración.
Otro aliado en el diseño de interiores para ampliar visualmente un espacio es potenciar las vistas. Dejar libre el espacio frente a las ventanas y mantener las cortinas abiertas, por ejemplo, hará que nuestra mirada no encuentre obstáculos y se dirija al exterior generando una sensación de mayor amplitud.


El mobiliario también juega un rol fundamental en la percepción de los espacios. Para ampliar lugares reducidos se recomienda equiparlos con muebles pequeños y evitar estantes y adornos en las paredes.
Otro detalle importante a considerar es que el mobiliario dispuesto de manera horizontal da la sensación de ocupar menos espacio que aquel que se coloca de manera vertical. Si la intención es “ampliar metros”, las líneas horizontales son las adecuadas.

Al considerar cuidadosamente cada elemento del diseño de interiores, como la distribución del espacio, la iluminación, los colores, los materiales y los detalles decorativos, se puede crear una atmósfera que no solo influye en la percepción espacial sino también en mejorar la calidad de vida, proporcionando espacios que inspiren y brindan mayor confort.